Divagaciones en torno a la Tolerancia

Hace unos días, en el usual claustro semanal con los amigos sin piedad (suena mejor "no-mercy-pals"), salió a colación un tema asociado a ciertas acciones u omisiones que se están dando en estas tertulias a propósito de mi nueva aproximación a la tecnología y redes sociales, básicamente vía Twitter.

Y no es que me interese seguir filosofando sobre esto (en realidad, sí; sobre cualquier cosa), pero algunas cosas rescatamos:

Este grupo de amigos (lo cual se repite en otros ambientes, ie familia) no me dejan tuitear tranquilo. Dicen que me ausento. Y, oh surprise, they are right!

Ahora bien, acá presento mi descargo y argumento de defensa:

• Casi todo lo que hacemos supone una abstracción... Por ejemplo, el escribir esto (este texto) obstruye necesariamente mi participación en el presente, porque la escritura es en efecto atemporal, requiere y lleva, simultáneamente, al aislamiento. De otra forma se transforma en transcripción o traducción y no en creación.
• Esto es particularmente cierto en los hombres, y menos cierto en las mujeres, con su acomplejante capacidad de Multi-tasking...

Como dijo D. (mi amigo y compañero de viajes y no el anónimo gentilicio oriental), parecía yo en esas circunstancias un "corcho en el océano", aunque un corcho feliz. Se imaginará el lector la imagen...

Para mi, los Blog, Facebook, Twitter... son una expresión del juego, de la libertad y el descontrol. Son también abstracción. Y omisión. Y son también un reto a la participación, la apertura, la socialización con reglas globales.

¿La razón busca el sentido en las cosas/hechos o las cosas/hechos tienen un sentido?

Ambas aseveraciones son verdaderas y simultáneas. Pero más allá de la verdad absoluta de un objeto o hecho, éste sólo cobra sentido en la intrerpretación de un tercero que es, por defecto, subjetiva y por lo tanto particular.

Así, la expresión a través de estos medios es también una proyección del pensamiento y emociones e historia de quien escribe y se comunica, como lo es la interpretación, razonamiento, emociones y actitudes generadas en los terceros que lean, escuchen, deduzcan, induzcan o produzcan.

Y esto se aplica a quienes tengan paciencia e interés en una visión diferente de la Vida; una capa distinta de interacción que permite el desarrollo de las ideas, a través del propio razonamiento y a través de la discusión abierta. Estos medios actuales son lo que fueron los libros de la era de Gutenberg, los geoglifos en sociedades rupestres o las piedras talladas en la prehistoria. Es la evolución natural de la sed de conocimiento y la necesidad del hombre de buscar certezas, cuando no es a través de la fe sino que a través de la razón (no siendo éstas necesariamente contradictorias).

Lapsus:

Tuve que parar la redacción durante un lapso. En el mismo fui a una reunión al piso 16 de un edificio y me vino a la memoria una característica penosa de la vida citadina, y en particular del stress de Santiago: Nadie saluda en los ascensores... Quienes suben miran hacia la botonera, se giran y miran hacia abajo. O hacia arriba. nadie se mira. O se se hace, es de reojo. Nadie interactúa, ni siquiera como norma de educación. Y esto no ocurre en todas las sociedades. Se da en particular -no en exclusiva- en Chile. Nuestro temperamento y personalidad introvertida, que está en proceso de cambio, se refleja en esta curiosa y ridícula actitud.

Tesis:

Esto refuerza el hecho de la rápida y creciente introducción de las redes sociales digitales en Chile. Somos un país tecnológicamente avanzado en estas lides. Y no sólo en comparación a economías similares, sino que frente a las economías dominantes en el mundo. Tal vez se deba a que en el anonimato tras la pantalla podemos seguir mirando el piso y apretar el botón al mismo tiempo de saludar y mostrar hasta lo más profundo de nuestros pensamientos y emociones. Y sin vergüenzas ni trancas de por medio...

 

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Diálogo usual:

Hace 20 años, escuchando la misma música (Led Zeppelin II), hablábamos de otras cosas, y sentíamos igual:

 

A. Dice: "hay que mirar el presente".

    (Suena Led Zeppelin. "Gallows Pole". Llega al corazón. Música. Ritmo).

B. Mirar o vivir?

C. Presente?

B. Porque no es lo mismo.

A. Me refiero a no andar en las nubes.

C. Nubes presentes?

B. Entonces no es mirar.

C. Y están presentes.

A. Me refiero a dejarse de sueños.

B. Y entonces cómo miras?

C. Entonces no están presentes, pero están.

A. Con ustedes es imposible comunicarse.

B. En sueños o acá?

A. Jaja.

C. Lo que pasa es que no estás mirando A.

A. Y qué ven ustedes?

B. Yo no veo nada. Estoy soñando.

C. En dónde?

A. En el presente!!

B. y C. Presente?

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Tras el impasse de incomunicación, salimos al jardín a eso de las 02:00 am, a jugar con los 2 perros papás y los 4 cachorros que quedan en casa. 3 machos y una hembra. Ella la más regalona, por lejos.

 

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Evitando la realidad.

Cuando nos enfrentamos a una discusión donde simplemente no somos capaces de sintonizar, ya sea por no entendernos o no ser capaces de ceder nuestras posiciones, se da testimonio patente de que nuestra búsqueda opera quitándole capas a la percepción. Disgregando nuestras propias creencias.

Evitando, evadiendo, conformándose con preconcepciones, sólo logramos una calma aparente y una ignorancia oculta. En general, todos requerimos de ciertas máscaras para poder afirmarnos y ver la vida desde algún punto de vista. De otro modo seríamos un loco más. Pero debemos tener claro que ese punto de apoyo es sólo eso, una referencia, y no necesariamente un absoluto.

 

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Sigue la conversación

D: "Uniendo el segundo nombre personal con la calle donde uno vive arroja el nombre de un actor de película porno..." Hagan la prueba.

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Then, after laughable laughs, quiet conversation.

Women.

What they love, where and how it is.

We project.

We imagine while music sounds and conversation still goes on and on....

@ 03:55 am